Mucho he tardado en retomar el blog,
empezó con fuerza pero parece que no me duro mucho..
quizá la entrada de hoy sea demasiado corta pero se que si no empiezo hoy no lo
haré en un tiempo...

No me salen las palabras, como siempre me encuentro en frente de mi
salón intentando explicar como ha ido cambiando todo, el
frío sigue,
días nublados llenos de lluvia y por que no, a veces casi hasta nieve.
Es curioso pero incluso se
podría decir que me gusta. Me he acostumbrado a este tiempo y ahora a comenzado a
despejarse. He estado disfrutando de los rayos que se colaban por entre las nubes estos
últimos días. Rayos que me empujaban a volar, que me recordaban
días despejados tirados en la hierba tocando la guitarra cuando antes nada importaba.
Me recordaban las palabras sueltas inventadas que antes intentaban colarse entre los arpegios que
salían de mi guitarra.
Ahora olvidada, llena de polvo, parece que vuelve a pedirme que la toque, esta desafinada, hay que pulir algunas cosas, pero.. que mas da... por que no volver a tocar sus acordes, olvidemos durante un tiempo los sonidos
electrónicos, volvamos a tocar las dulces
melodías que
salían de mi
acústica.
Había olvidado como me gustaba la
sensación de cuando la tenia entre manos.
Quizá sea
difícil escoger entre una guitarra u otra, pero de momento
escogeré las dos, la balanza terminara por inclinarse hacia un lado u otro
así que dejemos que sea esta vez el tiempo el que decida si las nubes
seguirán nublando mi vida, trayendo su
turbulento viento o si es el momento de que luzca el sol.